Pasión: El motor de tu vida

La pasión es una fuerza que nos motiva, que nos ayuda a levantarnos todas las mañanas, que nos imprime una sonrisa, es una energía que nos invade y nos da motivos para ir tras nuestros sueños. Sin ella no existirían artistas, empresarios, comerciantes, jefes, profesionales, ya que la pasión es eso que nos incita a dedicarnos a algo, a perdernos en la tarea que hacemos, a entregarnos por completo a lo que nos despierta ese sentimiento, es lo que nos convierte en lo mejor que podemos ser y nos brinda genuina alegría.

¿Qué sucede cuando no sentimos pasión en nuestra vida? Hay muchas personas que aún no han encontrado su camino. No están por completo seguras o desconocen lo que quieren, se entregan a tareas que no les ocasiona ningún placer y se sienten miserables gracias a sus elecciones de vida. Vivir sin pasión es privarnos de ese manantial inacabable de posibilidades, ese motor que nos empuja y nos motiva. El asunto radica en que debemos dedicarnos el tiempo para descubrir qué es eso que nos seduce. Siempre habrá algo que nos interese, que llame nuestra atención, y además siempre existirá algo que nos quite el aliento con la sola idea de obtenerlo. Descubrir nuestra pasión hará que nuestra vida tome un rumbo distinto, que comencemos nuestra búsqueda, que orientemos nuestras acciones a obtener aquello que deseamos, o realicemos tareas que son un fin en si mismas. Supongamos que alguien quiere bajar de peso y su cuerpo se ha convertido en su pasión, cada vez que esa persona se alimente sano y haga ejercicio, estara realizando una tarea que cuya meta es cuidar su cuerpo, mientras realiza esto, está contribuyendo a su pasión. Así como un pintor podría dedicar horas enteras a un solo cuadro y disfrutaría cada segundo del proceso.

Si aún no has sido lo suficientemente afortunado para develar qué es lo que te apasiona podrías sentarte a escribir todo aquello que te venga a la mente que una vez disfrutaste, quizás sea una tarea que ya has dejado de lado, la idea de seguir una carrera, también podrías escribir aquellas cosas que jamás hayas probado pero despiertan tu curiosidad. Ten paciencia, tu pasión te encontrara tarde o temprano y cuando aparezca no tendrás dudas.

Otra manera sería ir directamente a la acción, comienza a realizar tareas que nunca antes hiciste, podrías dedicarte a cocinar, hacer deportes, escribir, hacer manualidades, hay un vasto mundo de oportunidades si estás dispuesto a descubrirlo sólo tienes que dejarte llevar por tu placer y tu instinto. A veces la respuesta simplemente radica en intentar cosas nuevas, podrían llegar a sorprenderte.

Una vez que has descubierto tu pasión, lo más importante es poder realizarla. Muchas veces tenemos una vocación pero terminamos haciendo cosas que no están relacionadas con lo que queremos. Si ese es el caso, a no desesperarse, siempre podemos dedicar al menos unos minutos al día a hacer eso que nos enorgullece. Sí, nuestra pasión es buena para nuestra autoestima, poder mimarnos dedicando nuestro tiempo a eso que queremos es uno de los mejores obsequios que podemos brindarnos, por lo tanto, no importa que tan complicada nuestra rutina sea, siempre podemos robarnos al menos cinco minutos para nosotros.

Como toda energía, la pasión puede verse disminuida, habrán días que no querramos hacer lo que más nos gusta o hasta podremos enfrentarnos a bloqueos artísticos, pero no es nada que no pueda solucionarse. Cuando este desgano aparece, debemos descansar y descifrar qué es lo que nos está sucediendo, ya que podría tratarse de la famosa procrastinación, que no dudara en presentarse incluso aunque estemos realizando algo que amamos con cada fibra de nuestro ser. Mantenernos motivados es algo que requiere mucho esfuerzo y no es posible poder estar dedicado por entero a algo con toda la fuerza por un período demasiado largo de tiempo, debido a esto, debemos aprovechar esa ráfaga de inspiración y no soltarla, trabajar en lo nuestro cuando realmente estemos motivados.

Una cosa importante a tener en cuenta, es que nuestra pasión no debería estar circunscripta a un individuo. A veces tendemos a dedicarnos por entero a alguien, a dejar de lado nuestros propios intereses, nuestros sueños, nuestras metas, para entregarnos por completo a una persona, sacrificamos nuestra indivualidad para satisfacer a otro, incluso hasta podemos ayudar a ese otro a disfrutar de su pasión, mientras que nosotros nos quedamos con las manos vacías. El amor es un regalo muy bonito, pero si no tenemos cuidado, podemos perdernos en un laberinto complejo, podemos perdernos a nosotros mismos en ese juego que puede ser un arma de doble filo. Por eso, mi consejo es que tu pasión vaya mucho más allá de tu pareja, debes tener algo que te motive a ti, que te inspire a ti, que te alegre a ti. Si no tenemos herramientas propias para disfrutar de nuestro tiempo, más tendencia tendremos a depender emocionalmente de otro ser humano con todo lo que eso implica, el ser humano es un ser neurótico por excelencia que tenderá a no satisfacernos todo el tiempo, por eso generara en nosotros frustración sino poseemos un pilar de donde sostenernos. Debemos trabajar en nuestro propio mundo interno, demasiado rico como para dejarlo escapar.

Ve en busca de tu destino, de tu sonrisa, dedica tiempo a la razón de tu vida y verás como todo lo demás, sin importar que tan terrible sea, comienza a verse más bonito ante tus ojos. Si por dentro eres feliz, podrás exteriorizar esa felicidad en el mundo, podrás impregnar de alegría aquellas cosas que en realidad no te agradan y se convertirán en más llevaderas. Es sólo cuestión de intentarlo, tu pasión enriquecerá tu espíritu.